Tampoco tenía suerte con los chicos!
Ella misma contó que en el cole pasó completamente desapercibida. “Tuve dos amigas pero me sentaba al final de la clase y me concentraba en mis tareas. La escuela es un momento muy extraño en la vida, no tenía mucha confianza en mí misma”.
Si bien no era popular, tampoco era motivo de burla ni de agresiones como es tan común en las secundarias de Estados Unidos. “Nadie se la agarró conmigo gracias a que mi prima era una de las chicas populares. Ella siempre fue muy protectora conmigo, así que supongo que fui muy afortunada”.
Y ¿adivinen qué? Tampoco le iba bien con los chicos!“Jamás salí con chicos en la escuela. Tuve un flechazo de un chico, pero jamás se lo dije. Hice lo que todas las chicas hacen: ¡lo evitaba!”, contó.
