En Papúa Nueva Guinea esta especie es conocida como el corta-bolas o Pacú, ya que según cuentan algunos residentes del país, en 2001 atacaron a varios pescadores y murieron desangrados en el agua después de sufrir graves mordeduras en los testículos.
Se presumía que esta especie era inofensiva ya que su alimentación se basa en nueces, vegetales y caracoles. Sin embargo, para los pescadores varones se está convirtiendo en una verdadera pesadilla por los dolorosos ataques a los testículos.
Un pescador que había capturado uno de estos animales, lo presentó al Departamento de Recursos Naturales, pensando que se trataba de una piraña. El pez puede llegar a pesar 55 libras y posee una increíble dentadura muy parecida a la de los seres humanos.
