El cantante confesó que cree seriamente que padece de un trastorno de déficit de atención.
El intérprete de Baby no fue diagnosticado con este problema, pero comentó que cuando estudia en grupo no logra poner atención en las cosas, y su mente divaga:
Sólo tengo tres horas por día para estudiar, lo cual es bueno. Yo divago mucho, así que es mejor algo personalizado, por eso tengo un tutor. Tengo un pequeño caso de trastorno por déficit de atención. Si no entiendo algo, me aburro y no presto atención. Mi profesor tiene que enseñar las cosas de manera divertida para mí, comentó Justine, agregando que por cada hora de estudios, tiene un descanso de 10 minutos.
