Justin Bieber ha confesado que tiene déficit de atención lo que no le permite hacer la misma cosa durante mucho tiempo seguido, lo que le afecta a las clases que recibe a domicilio.
"Sólo tengo que hacer tres horas al día. Me distraigo. Definitivamente, me distraigo. Tengo un leve caso del síndrome de déficit de atención", comenta.
Además, se aburre con facilidad y al estudiar tiene que hacerlo de manera divertida. Vamos, como cualquier joven de su edad.
En la misma entrevista comentó un tema muy serio. Dijo que su madre, Pattie Mallette, fue alcohólica antes de que su hijo naciera. "Mi madre no era la mejor persona, quiero decir, era buena persona, pero cometió fallos, bebía, probablemente tomaba drogas y a mí me lo ha contado porque dice que ella ya nos hizo suficiente daño a los dos".
Pero cuando hace 16 años, tuvo a su primer hijo, cambió por él. "Cuando nací, dejó de fumar, dejó de beber. Ella hizo todo eso por mí", comenta al diario "Guardian".
